Cuando los sueños nos parezcan
un camino con destino al destierro
empezaremos una vida nueva
carente de ideas y llena de complejos,
un regalo al alcance del vago
que se conforma únicamente
con lo que se encuentra,
nunca más habrá caminos nuevos
y se destruirán los viejos por usados,
la fe huirá de la faz de la tierra
seremos pasto del plástico
de las enfermedades viejas
y el cielo cambiará del azul al blanco,
solo entonces se apagarán las velas
de todas las bibliotecas
donde se esconde tanta sabiduría,
producida por la fantasía
que en sueños pasados
nos regalaron infinitas alegrías…