Altivo en poderes imaginarios
y leguleyo del tres al cuarto
deambula estampado en la frente
el legado poco respetado
de entendido más que de estudiado,
alma poco respetable que huye
como cobarde ante cualquier afrenta,
de nariz respingona
y talle de alma vengadora,
difunto en vida y hacedera cómoda
en mercados en los que el trabajo
no dificulte por el esfuerzo en su cometido,
todo ello le mantiene despierto
a todo aquello que cayendo del cielo
llene su monedero y su bolsillo
por lo sencillo de su apropio….