De aquel mundo solo comía
el que siguió cuidando sus campos
dedicándoles lo mejor que sabia
sembrándolos cada año,
hicieron que nada les faltara a estos,
murieron todos aquellos que pensaban
solo en el sol que les hizo ricos
y no supieron aprovechar sus ganancias,
aquellos que pensaron
que por ganar mucho en poco tiempo
les duraría toda la vida
y es que este planeta nuestro
no para de dar vueltas avisándonos,
que en cada una de ellas
cada una de las alegrías luce distinta
formando parte de nuestra vida,
excepto la tierra y el agua
que siempre lucen iguales
cuando se las cuida
porque son parte imprescindible
de las que nos servimos los humanos,
como algo indispensable para vivirla…