
Dieciocho años esperando
para que la vida me recuerde
que estamos en sus manos,
dieciocho años deseando
y no pude estar a tu lado,
tú, hermosa como siempre
retando al mundo tu suerte
tu esfuerzo y tu valentía
hija, vive en grande
esta nueva aventura
como lo haces siempre
y que no te pare la desidia
ni el desánimo te frene
porque perteneces
a una raza valiente,
una raza donde el esfuerzo
trabaja siempre en presente
una raza al fin y al cabo
que entiende que vivir
es sufrir y disfrutar de lo que se tiene,
ganas te sobran, belleza
a cantaros y fuerza
cuando la necesitas,
sabes sacarla de donde sea…