Una lucha contra los miedos
donde fracasan cada uno
el perpetuo deseo de todos los apegos,
la fortaleza desapercibida
a la que te enfrentas
con los matices libertinos
dibujados por una mano maliciosa
que te mece despacio
colgando de ceñidos hilos
en una ideología descalza
por una esencia que se escapa
cuando mas hace falta,
la etapa de un camino
pendiente desde el principio
de un final no deseado
al que nos arrastra con prudencia
la partida silenciosa,
siempre acompañada
por notas de una música
que sin darnos cuenta nos prepara
dejándonos sin fuerza
para con cariño aceptarla,
el terrible destino de un viaje
que se intenta lejos de los sueños
por prudencia,
con la suerte de que casi siempre
se alcanza,
vacío de alma y saturado de vida…