La vi cruzar el cielo
pálida como nube que se aleja
arrastrada por el viento frio
de una aurora de poniente,
quemado por la rabia
dejaba un aura misteriosa
por su mirada encendida
como rayo en noche de primavera,
quizás aun no conocía su destino
que se auguraba lleno de barreras
por la desdicha invasora
que se había adueñado de su alma,
la vi mientras se alejaba
meditando su paso hasta ahora por la vida,
un tiempo vacío que le resonaba
en la conciencia como tambores de guerra
besos con sabor a tierra seca
que le recordaban la arcilla
de la que estaba compuesto su cuerpo
y un amor oscuro que nunca compartió
con el suyo, quizás alejándose encontraría
todo aquello que le faltó
regalando su corazón a cambio
de tinieblas vacías con sabor a violación…