Fija,
tu mirada,
con frescura
en mi vista sincera
preguntaba....
La respuesta
fue fruto del descaro
de mi sonrisa
que reveló
la siguiente réplica:
me siento tan repleto de energía
que si un ejercito me desafiara,
jamás dudaría
de una victoria completa…
ven….
Seria el grito de guerra ¡¡¡