Con los pies descalzos
y a ritmo de sevillanas
crujen las tablas
con sus faldas de volantes,
y en la pista reinas
en una casa de Andalucía
con sabor a romero
y la alegría por sombrero,
manos que se retuercen
dando ritmo a unas castañuelas
buscando una guitarra española
con la gracia mallorquina
y la mantilla madrileña,
por peineta su belleza
con el desplante como esencia
Cleo y Marga reinas de una fiesta
por seguirillas canela fina
por sevillanas
duendes y grandes de Palma…