Testigos de nuestra amistad
está el sol, la luna
padrinos de nuestro afecto,
la distancia, el querer
y un sueño.
Somos un viaje de por vida,
un rosal sin espinas,
una fusión de apegos
en el limbo de los ensueños.
Te quiero como amiga fiel
a la que cerca o lejos,
siempre y a pesar de todo,
siempre y muy dentro de mi corazón,
como un tesoro
y con todo mi ser
de por vida adoraré.