Hoy la calle de la cuesta
ya tiene nombre,
hay nuevas escuelas enseñando
todo aquello que a escondidas
oías en una radio,
que aceleraron tu partida,
es del partido que defendiste
en una guerra
de la que nunca quisiste hablarnos,
las calles
están más limpias que nunca
y aunque falta mucho por dejarlo
como tú siempre imaginaste,
tu pueblo ese por el que morías
por volver cuando dejases el trabajo
hoy, sí que respira ese sueño
por el que sufrías cada día
hoy, aunque sea desde un retrato
miro tu tumba y te recuerdo
padre de una familia tenaz
orgullosa como tu querías,
que mira al cielo
y que te hecha mucho de menos…
felicidades en tu día papá¡¡¡