No formaste parte de un sueño
oculto por la soledad,
hermosa y sin dueño
cómplice del miedo
a dejar de soñar,
esperanza sin abono
por la que quise cambiar
sin variar de argumento,
nuestras risas
nuestros momentos juntos
nuestras victorias
y nuestros secretos
forman solamente parte
de nuestro recuerdo,
y que importa a nadie
lo nuestro,
el cruel a veces destino
ya se cobró el peaje
despojándonos del feudo
de regalarnos para siempre
amor eterno,
y aunque me sentí esclavo
por la seguridad de tus pasos
el tiempo me ha ayudado
a liberarme de seguir un camino
de sueños eternos
que conducía hacia el abismo
de continuar a tu lado...